Sabor antiguo con mirada del siglo XXI

Partiendo de una vivienda situada en uno de los barrios más nobles de Valencia, el equipo de Área Arquitectura.design desarrolló el proyecto para sus clientes de forma integral: desde la arquitectura hasta el interiorismo pasando por la dirección de obra, cuidando al máximo todos los detalles y procesos. Los propietarios, una familia joven con unos gustos y necesidades claros: querían una zona de trabajo en la vivienda que estuviera vinculada al salón y con todas las estancias de la casa conectadas entre sí, todo ello con sabor a antiguo revisitado. El apartamento se utilizó con anterioridad como oficinas, con una compartimentación excesiva y la cocina alejada de la fachada principal, propia de los edificios de los años 40.

Fotos: Alfonso Calza

Revisitando el espacio con la mirada del siglo XXI se dio la vuelta a este piso. A partir de la espina dorsal que supondrá el espacio de almacenaje, toda la vivienda girará en torno a él. La materialidad en los acabados de este almacenaje, madera lacada en tonos oscuros, junto a la modulación que se mantendrá a ambas caras de los módulos, marcará el ritmo de todas las estancias. A través de él se producirá el inicio en el recorrido de la vivienda recibiendo desde la puerta principal, dará acceso a los dormitorios y nos conducirá a la zona de día. El otro elemento que marca el carácter del proyecto es la estructura. Se decide transformarla en un elemento escultórico dejándola vista; desde el pilar del acceso en ladrillo y el resto en hormigón. Se tomará como referencia el gris de estos pilares ubicados en el salón comedor para introducir la paleta de colores sobre la que se trabaja en el interiorismo.

Dentro de la zona de día, la cocina se reubica en ella y se abre a los espacios del salón comedor. El color blanco le ayuda a trasladar la luz que le llega desde la fachada principal iluminando el espacio.

La zona de noche está servida completamente del almacenamiento del que hablábamos al principio conteniendo los usos más privados de la casa. En cuanto al interiorismo se tuvo muy presente la personalidad de los clientes. La paleta de color elegida, combinación de gris y mostaza, parte de los lomos de los libros antiguos a los que los tienen afición.

No Comments Yet

Leave a Reply